viernes, 18 de junio de 2010

VI. SU OPINIÓN VALE!!

Don José Manuel cada día estaba más a gustó con Josefina; se reunía para informarle ella acerca de la administración de los departamentos, y él le  preguntaba la opinión sobre la línea editorial de la revista.
- Me parece que ya se ha consolidado la mujer esposa, madre, hija, la mujer cariñosa, pero también debería ser importante introducir a la mujer ejecutiva o trabajadora, la mujer más peleadora a fin de atraer a un nuevo nicho de  lectores y modernizándonos en relación a la sociedad actual.- Don José Manuel sugería.
- Si pero como ir incluyéndolas con trabajos y perfiles tan diferentes. No tiene nada que ver los problemas sociales de un grupo con otro.- Replicaba Josefina, agregando
- Y si le dieran una mayor amplitud con entrevistas a mujeres desde lo laboral, opción sexual, luchas políticas, incluso su responsabilidad social, por ejemplo?
- Pero sexual aún no incluiría.  Fue solo una idea, es fuerte mal visto y si se da, el grupo socio económico A1, por ponerle un titular no lo aceptaría o no lo reconocería. Esto está más abierto en el mundo del arte, pero para el resto…..repuso don José Manuel
- Pero ....podríamos hacer una encuesta de remuneraciones entre hombres y mujeres para un mismo cargo, yo le puedo asegurar que a pesar que salió la ley de “igualdad de sueldos” me parece - que la realidad dista mucho.. De hecho hace poco lo leí en el diario, que solo un 6% de las mujeres están igualadas.
- Claro y se podría continuar con el nivel de satisfacción de ambos. Me parece que los hombres están menos satisfechos con las metas, pero a cambio las mujeres demuestran probablemente mayor insatisfacción en lo que se refiere al plano familiar etc. Hay Josefina, contigo puedo hablar tanto pero aún no logro llegar a tu plano emocional.
- Es que no es muy distinto de lo que se debe imaginar, revolviendo una tasa de café a medio tomar Josefina trató de esquivar la pregunta
- Que sabes tú lo que yo me imagino? con voz fuerte respondió don Jose Manuel
- Bueno, supongo porque lo encuentro muy intuitivo y eso es una gran carta para descubrir al otro.
- Pero tu matrimonio como anda
- Más mal que bien, mientras continuaba con el juego de revolver el poco café que le quedaba.
- Porque?
- Don José Manuel no quiero pensar, ya le he metido bastante cabeza y no resulta, le respondió en forma enérgica y casi poniendo punto final.
- Y un psicólogo?
- Uf! Creo que me los recorrí a todos.- Respondio con voz lateada, y mirando el techo del salón de té
- Y entonces que vas hacer?
- Dejar que pase el tiempo, que Graciela crezca y veremos.
- Que error. Sabes el daño. Ese sería un buen tema. Primera etapa: alineación parental, segunda separación tardía. Josefina estoy aquí para lo que necesites, a mi me encantaría poder ayudarte, pero tres son multitud.

Josefina se tupió entera con esa frase, miró el reloj, tomo su cartera y se despidió por lo atrasada que estaba. Ella mejor que nadie sabía que la razón era otra. Se preguntó una y otra vez que habria querido decir con "tres son multitud",  hasta que llegó a su casa y se encontró con Raimundo bebiendo su acostumbrado gin y comentándole que no se olvidará que mañana tenían matrimonio.

- Te acordaste de comprar el regalo? Pregunto Raimundo
- Si la semana pasada lo compré, a propósito  Qué te parece si me pongo el vestido negro?
- Está súper trillado
- El morado entonces? mientras hurgeteaba su closet
- Está pasado de moda
- Y que me pongo entonces? alterada Josefina preguntó con las manos en las caderas
- Tienes el closet lleno, ve otra cosa…

Josefina revivió que para un matrimonio de un primo de él, se arregló con esmero, se subió al auto y Raimundo le comentó lo pésimo que se veía. El trayecto a la iglesia y después a la fiesta fue una pesadilla. Mientras buscaban la mesa que les correspondía en la fiesta, Raimundo no paró de piropear a cada mujer e incluso a algunos hombres que pasaban cerca de él. El cocktail lo hicieron caminando y saludando de mesa en mesa, casi como los mismospadrinos, hasta que llegaron a la de ellos. Con sorpresa las personas que se encontraban eran todas las asesoras del hogar, jardineros y mozo de la casa del novio. Raimundo feliz pasó hacer el "rey tuerto en el país de los ciegos".por supuesto que no dejaban de celebrarlo de sus chistes y anécdotas que les relataba. Josefina molesta, indignada y pisoteada ante tanta falta de clase y extrañada de la  ubicación, le solicitó que se fueran a la casa, pero ante la negativa de Raimundo....se disculpó astutamente con que iba al baño y salió corriendo del Club de la Unión (de la socialité capitalina) tomando el primer taxi que pasó por el lugar. En la casa, enrabiada y decepcionada se sacó cada una de las pilchas, tomó una pastilla para inducir el sueño y no supo de la llegada de su marido hasta el día siguiente.

A su vez Raimundo aprovechó de sacarse su rabia – que también sintió la noche anterior- por el abandono de su mujer, con lo que le era más natural. No hablarle a nadie de la casa, no comer en la mesa ni aceptar comida alguna hasta que al anochecer, cuando todos estaban acostados se levantaba y se hacía verdaderos manjares. Otras veces mostraba su rabia pegando portazos en el momento que alguien llegaba a casa. Pero lo más frecuente y doloroso para Josefina era el castigo sexual que por meses recibía.

Al principio ella no lo tomó en cuenta, pero con el correr de los años, estos períodos se fueron alargando tanto hasta pasar más de dos años sin hacer el amor. La autoestima se iba minando y la conversación desaparecía. Cuando ella le tocaba el tema el le respondía:

- Pero quien va ha querer acostarse contigo después del día que me distes?
- Raimundo no juegues con fuego, separa las cosas y no dejes que los problemas entren al dormitorio.
- Yo no soy como tú, que con tal de acostarte te da lo mismo todo.
- Que grosero e hiriente que eres.

Una vez que el tiempo era lo suficientemente largo y Josefina no recordaba la razón del castigo, se encontró más de una vez pidiéndole si quería "tener relaciones"; las respuestas eran variadas; “Espera que termine de ver esta película, cuando acabe el noticiero de media noche,  o no porque los niños nos pueden sentir”.

Josefina más pequeña se sentía, no sabía donde esconderse. Pensaba “Que ganas de hacer un hoyo en la cama, pasar por un túnel y aparecer en otro lugar!” – lo pensó miles de veces, hasta que después de inventar un viaje al sur de Argentina, a un lugar idílico con todas las cosas a su favor, se dio cuenta, que el problema no pasaba por ella.

Bariloche maravilloso, el hotel Llao Llao, con canchas de golf, spa, la pieza con vista al lago Nahuel Huapi, con una gastronomía del más alto nivel y toda clase de actividades, fue el lugar escogido.
Durante el día, visitaban la fábrica de chocolate y sus compras, visitaban un centros de skies, el museo paleontológico, o los miradores a la ciudad,  tours, cabalgatas y excursiones, no fueron suficientes para lograr una noche de amor.

Las tres primera noches, Raimundo rehusó, por lo que Josefina abrumada ante su fallido intento, se decidió cambió de pieza, cuando su marido permanecia en el bar, bebiendo un trago. Una vez que Raimundo descubrió que  esa noche su mujer no dormiría junto a él,  bajó al lobby y fue tanto lo que la buscó sin encontrarla, hasta que el recepcionisyta del hotel le informó que había contratado una nueva pieza; la 323.
Furioso fue al dormitorio contiguo a suplicarle, probablemente más por vergüenza que por amor que volviera  a su lado; pero ya era tarde como para revocar tal decisión. Josefina había tomado la resolución que nunca más se dejaría basurear de esa manera, y jamás la volvería a tocar.

La puerta del dormitorio  cerrada fue testigo del siguente diálogo:
- Josefina vuelve, no seas cabra chica
- No insistas porque no voy a volver
- Pero tu crees que alguien se puede calentar cuando le preguntan:”Quieres acostarte conmigo?”
- Probablemente no. Pero te has detenido a pensar como te he buscado y rogado durante tantos años? Se te olvida que primero pensé: bueno estoy embarazada, después bueno estoy post parto y poco atractiva, después quizás tenga más aliento y o esté hedionda, o la piel áspera y  así sucesivamente. Me cabrié de tu manejo asqueroso, el uso que haces de esto como si fuera un premio. Te aseguro que nunca más volverás a tocarme, y mañana no me exijas fidelidad, porque entre tú y yo solo hay fraternidad. Anda a tu pieza que mañana es otro día. – Agotada de gritar y sin importarle si algún huésped la había escuchado
- No me voy si no vas conmigo.

Al no ver resultados, Raimundo se percató, que por primera vez Josefina estaba fuera de si, y que lo que le decía estaba dispuesta a cumplirlo.
No supo como se voló en los recuerdo……….. Lloró de impotencia frente a sus actos…. y cansada se durmió, entre sollozos y mocos.
Volvieron a la capital, y para el mundo, no pararon de contar la maravilla que era Bariloche. Para ella, había sentado un antes y un después.

En la oficina había poca pega, por lo que conversando con sus compañeras les leyó la crónica que entregaría ese día. No pararon de reírse; una más y otras menos pero a todas les tocó un poco.

“¿QUE SE ESCONDE DETRÁS DE LA GUAPA.......

Anoche tenía el matrimonio del hijo de una amiga. Deseaba verme como actriz de cine, y entrar por la alfombra roja, que en este caso sería verde, el lugar escogido: una hacienda en las afueras de Santiago, pero con varios componentes que jugaban en contra mío. Primero: Para ser actriz debía hacer alguna inversión (zapatos, cartera, alhajas, vestido, peluquería, maquillaje,  etc.) No hice ninguna o casi ninguna de las anteriores.

Que maravillosos mis zapatos negros de gamuza que compré en Buenos Aires, cuando mi hermana iba a ser madrina de matrimonio de su hijo, y por desgracia le quedaron angosto de tobillos, FUERON LOS QUE USÉ.; solo debí de preocuparme de sacudirle el POLVO para que se vieran más nuevos. (De esta palabra hablaremos en otra oportunidad, ahora la usaremos literalmente como: pequeños bichos o “ácaros”)

Continuando con mi atuendo, descubrí una cartera negra, como de nudillos que fue de mi madre, y a la cual le faltaba la cadena para colgar, pero recordando como usaba los sobres Lady Di, pude llevarla dignamente, a pesar que adentro llevaba los años; anteojos de presbicia, paracetamol, pañuelitos desechables, ventide para el asma, carné de chofer por si mi marido se siente mal y no es capaz de manejar de vuelta por una copitas demás, y dinero por si me peleo con mi hombre y decido volverme en taxi, cosa que en más de una oportunidad ha ocurrido.

Las alhajas era lo más fácil, eran las que me quedaron después del robo y no había nada más que hacer, por lo que eso no fue un tema.

Pero a cambio el vestido si lo fue. El vestido no solo nos viste, sino además nos modela, muestra nuestra figura que deseamos exponer, aquella que queremos lucir como si el tiempo no ha pasado, y más aún cuando a casi tres meses de haber dejado de fumar, has aumentado tu peso en un 10%. Deseas que te forme, que guarde tus secretos de carnes (porque los huesos van para un lado y la carne para el otro; es decir flameas cual bandera); quieres ser vista como deportista y gimnasta, a pesar que ambas palabras no están en tu vocabulario, pero la figura, es la figura, y haciendo una exposición en el living como si fuese una pequeña boutique, elegí junto a la polola de mi hijo, previa prueba de casi todo, lo más TOP que yo tenia, y lo que me haría ver más “mina”, mi dulce vestido rojo con tul negro, que por ser strech, hace ver tu figura jovial.

Baño y peluquería son primordiales en situaciones como esta: Explicaré los pasos que seguí y que tan buen resultados me dieron. Llené la tina con agua, y le introduje sales de baños (regalo de mi hijo para mi cumpleaños) a temperatura de 37°. A mano tenía la máquina de afeitar de mi energúmeno a fin de eliminar todo aquel rastro de pelo, vello, lana en axilas y piernas al menos. (Lo demás no era necesario, no se iba a mostrar y menos ocupar). Vacié la tina una vez realizada la operación, para no correr el riesgo, que estos primitivos, queden dando vuelta por algún sector del cuerpo (espalda, por ejemplo) difícil de visualizar. Di la ducha y terminé con lavado de pelo, acondicionador y masaje capilar. Por mientras pude hacerme un aseo profundo a mi cara, con algún producto que elimine todo vestigio de puntos negros y barritos. En otras palabras un “piiling”. Terminada esta operación, desenrede el cabello y enjuague profundamente. Trate de no perder ni un pelo de más. Esa es zona de mantener todo lo que hay (vieja y calva es una desgracia). Me  sequé como acariciando mi cuerpo con una toalla de 20 años atrás, (áspera y delgada) y escuche románticamente los grito y buenos deseos de mi marido, que me exige que salga del baño, ya que no van a llegar a ningún lugar.

El energúmeno comenzó a funcionar!!!!!!

Con tanto buenos deseos, salgo corriendo, me pongo todo lo anteriormente descrito, sin antes llevarme de mi baño, secador de pelo, cremas varias (cuerpo- cara- bronceadora instantánea, borra arruga, iluminadores etc.) y corro a otro baño, que desconozco y no lo siento mío para terminar, para llegar a la etapa del PROCESO DE ACABADO o de TERMINACIÓN como animan en las constructoras los retoques finales, previos a la entrega de un departamento.

El peinado es muy fácil, porque cuento con una cabellera larga, de un tipo de pelo fino y poco pigmentado, bastante natural y demasiado sedoso, pero poco brillante, sin cuerpo, reseco en las puntas, propenso a partirse, por lo que me pareció que lo más apropiado era tomarme el pelo y afirmarlo con dos palillos chinos en los tonos del vestido.

En fin toda la operación tomó casi el día entero.

Yo me sentía guapísima.!!!!

Llegamos al matrimonio y los piropos fueron bastantes, incluso uno más allá de lo narrable. Pero detrás de toda aquella preparación se escondieron varias cosas, que solamente yo sabía:

- EL COLON  que se hinchó por las peleas por el baño y para rematarla  el trayecto; típica pregunta del marido: por donde me voy?  y el que uno dice es justamente lo contrario al que él quiere escuchar.
 Y por otra parte los nervios de...... LO QUE ESCONDI DEBAJO DE MI VESTIDO ROJO..... mis estrías y celulitis, mis rollos, mis lunares de exceso de sol, mis pechugas lacias, pero igual............................
me sentí MISS CHILE”